Este libro es el resultado de un ejercicio académico que tiene como inspiración central la necesidad de comprender tanto el complejo edificio de la constitución de la ciencia moderna, como, por su puesto, ¿el lugar¿ que ocupamos en este proyecto inacabado como profesionales de las ciencias sociales y humanas.
Así mismo, tiene como función revisar la investigación y las metodologías utilizadas por la filosofía y las ciencias sociales a la hora de enfrentarse al discurso monolítico de las miradas epistémicas hegemónicas.
La reflexión está motivada por la pregunta acerca de cómo se puede aportar desde la teoría al ámbito de la práctica. Tiene también la pretensión de comprender el hiato y la escisión, entre teoría y práctica, y la obligación de encontrar alternativas, para restablecer su vínculo, mas no como antes, sino con perspectivas azas novedosas.