Este libro desarrolla un modelo de universidad a partir de la investigación formativa (IF), tradicionalmente limitado a las prácticas docentes. La IF sirve como objeto de estudio para abordar las funciones básicas de la universidad: organización, docencia, investigación, extensión y proyección social, y las gestiones administrativa y financiera. Se presenta como un estudio de caso extremo y longitudinal, en el cual las producciones académicas de las dos últimas décadas funcionan como rastros puntuales de cómo intervenir la institución, con el propósito de transformarla en una organización que desarrolla conocimiento complejo sobre el contexto regional. En esta tarea, el autor de este libro participó -desde abajo- como profesor y contribuye, en diferentes épocas y con papeles diversos, a lograr este cometido: construir un modelo de universidad que orienta en la práctica la construcción de dicho conocimiento. Luego, con los procesos de reajuste de la institución a nivel nacional, esta función del modelo se va desplazando y queda reducido a su mínima expresión. En este marco, donde varios enfoques operan en el mundo objetivo institucional, por ser una experiencia social singular, aquí se busca identificar los aprendizajes y, en particular, desarrollar un modelo que ofrezca respuestas satisfactorias a los retos que viene enfrentando la universidad, en especial los relacionados con procesos de deslocalización del conocimiento en el contexto del capitalismo cognitivo. Así, el presente libro se divide en cuatro partes: la primera documenta la ontogénesis de estas ideas; la segunda expone las etapas de construcción del modelo; la tercera evalúa el papel del modelo como orientador de los procesos de intervención social, y la cuarta delinea conceptos nuevos como abdicción y universidad como organización retroactiva, que pretenden aportar al enriquecimiento de una IAP organizacional construida desde la universidad, glocal, colectiva y humana.